La Sociedad de la Media Luna Roja Palestina precisó en un comunicado que sus equipos trasladaron dos cadáveres en la norteña ciudad de Beit Hanoun, una víctima mortal y dos heridos en la localidad de Al-Faraim y otros dos lesionados en la sureña gobernación de Rafah.
La agencia oficial de noticias palestina (Wafa) reportó otro deceso en la ciudad de Rafah, fronteriza con Egipto.
Desde el inicio del alto el fuego, el 19 de enero, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) mataron a 116 personas en el enclave costero e hirieron a cientos, según estimados de Wafa.
La tensión escaló en las últimas horas como resultado de negativa de Israel a pasar a la segunda etapa de la tregua, como le reclamó el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamas).
El gobierno del primer ministro Benjamin Netanyahu solo quiere extender la primera fase por otros 42 días para lograr la liberación de sus compatriotas en poder de las milicias palestinas, mientras estas quieren avanzar en el proceso para poner fin al conflicto y reconstruir el enclave costero.
En medio de este panorama, Israel paralizó este domingo la entrada de ayuda humanitaria a Gaza.
Por órdenes del Gobierno, las FDI cerraron todos los cruces fronterizos en una dramática decisión que coincide con el inicio del Ramadán, mes sagrado para los musulmanes, destacó la versión electrónica del diario Yedioth Ahronoth.
La medida fue adoptada anoche durante una reunión del gabinete de seguridad, encabezado por el primer ministro Benjamin Netanyahu, y cuenta con el respaldo de Estados Unidos, subrayó.
En respuesta, Hama) denunció la disposición y acusó a Israel de planificar un genocidio en el enclave costero, donde viven más de dos millones de personas.
Por su parte, la Oficina de Prensa del Gobierno en Gaza afirmó que este país confirma, una vez más, su despreció por las leyes internacionales.
Ningún camión entró en Gaza esta mañana ni lo hará en este momento, amenazó Omar Dostri, portavoz de Netanyahu.
La televisora Al Jazeera estimó que la medida busca presionar a Hamas para que acepte los reclamos de Israel, basados en el llamado “esquema Witkoff”.
El enviado por el presidente estadounidense, Donald Trump, para Medio Oriente, Steve Witkoff, propuso extender la primera fase de la tregua por otros 42 días, durante la cual serían entregados en la primera jornada la mitad de los prisioneros israelíes, tanto vivos como muertos.
Sin embargo, Hamas rechaza esa posibilidad al considerar que perdería su principal baza de negación sin obtener nada a cambio, en especial un alto el fuego permanente.
El grupo armado exige el cumplimiento de los compromisos acordados, según los cuales, tras la primera etapa del alto el fuego se pasaría a una segunda, que incluiría el fin del conflicto y la retirada total de las FDI.
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