«El FSB frustró una operación del servicio de inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania, supervisada por los servicios secretos de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, para robar datos personales de alumnos de las escuelas de Moscú y de la provincia homónima y reclutarlos posteriormente», señaló la entidad.

Según precisó el organismo, la inteligencia ucraniana accedió ilegalmente a los sistemas informáticos de varias organizaciones del movimiento infantil y juvenil ruso.

En nombre de estas instituciones, detalló el FSB, la inteligencia ucraniana envió cartas falsas a las escuelas de Moscú y de la región homónima cuyo fin era obtener datos personales de los escolares para reclutarlos e implicarles en actos de sabotaje en el territorio de Rusia.

Las consecuencias de esta operación ucraniana fueron neutralizadas gracias a las medidas oportunas de contrainteligencia, destacó el FSB.

Las escuelas de Moscú y de la región homónima, indicó, fueron advertidas de las provocaciones que preparaba la inteligencia ucraniana.

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