La víspera, tarde en la noche, los 71 diputados apenas concluyeron la lectura de una 300 modificaciones a la iniciativa presentada por el Gobierno el pasado 6 de noviembre y que con diversas presiones pretende imponer en el pleno, según denuncian los trabajadores que se manifiestan en las inmediaciones del Legislativo.

Las diferencias entre bancadas surgen en capítulos como la reglamentación de la inversión de los fondos de la CSS y las normas sobre la precalificación e idoneidad que deben tener las entidades financieras de los recursos y fondos de reserva del Seguro Social, entre otros aspectos.

También presentaron cambios a las jubilaciones y cuotas necesarias para establecer las pensiones de retiro de vejez, y se mantiene en vilo el aumento de la edad de jubilación.

La decisión de volver este viernes a los debates se tomó luego de que Ariana Coba, diputada de la bancada Panameñista, presentara una impugnación de la decisión presidencial sobre el cierre de la discusión del proyecto, con el objetivo de retirar e incluir nuevos cambios que, según ella, son esenciales para la viabilidad y aplicación de la iniciativa.

Por su parte, voceros de la alianza Pueblo Unido por la Vida, amotinados en las calles, como Saúl Méndez, líder del sindicato de los obreros de la construcción; y Marco Andrade, de la Confederación Sindical de Unidad Sindical Independiente, alertaron sobre la pretensión del Ejecutivo de robarle los recursos de la CSS para entregarlos a los bancos y las empresas privadas administradoras de pensiones.

También denuncian que las propuestas del movimiento popular como retomar el sistema solidario que beneficia a trabajadores y sus familiares no son tomadas en cuenta.

Méndez rechazó lo que ha dicho el presidente de la República, José Raúl Mulino, es decir el poder económico quiere salvar el sistema financiero con la plata del Seguro, y para ello viola la Constitución, la independencia de poderes, entra al Legislativo para imponer, presionar y acosar.

Ello obliga, según explicó, a tomar acciones como estas manifestaciones que continuarán para impedir que los oligarcas y políticos corruptos se roben el dinero del pueblo que está en la CSS como también lo hacen con la del Canal, pero serán derrotados en las calles, remarcó.

Las reformas tienen que beneficiar a las mayorías y no a las minorías como pretende el Gobierno, agregó del dirigente sindical.

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