El abogado Fernando Bastias, representante del CDH, alertó que los cinco fallecidos reportados hace unos días estaban en pabellones que no eran utilizados como zonas de aislamiento, lo que pudo facilitar la propagación de la enfermedad a otros sectores del penal.

El municipio de Guayaquil exigió este sábado medidas urgentes y transparencia al Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (SNAI) y al Ministerio de Salud.

En un comunicado, la alcaldía advirtió que la crisis sanitaria en las cárceles “pone en riesgo a toda la sociedad” y que la falta de acción podría derivar en una emergencia de salud pública.

De acuerdo con Bastias, la enfermedad no solo afecta a los presos, sino también a funcionarios, policías, militares y familiares que visitan el centro.

Las autoridades esperan los resultados de las autopsias para esclarecer las causas exactas de los fallecimientos, mientras el CDH insiste en una intervención urgente para evitar más contagios y muertes dentro del sistema penitenciario.

Las cárceles de Ecuador permanecen bajo control de los militares desde que en enero de 2024 el presidente, Daniel Noboa, decretó la existencia de un conflicto armado interno para enfrentar a las bandas criminales ligadas al narcotráfico.

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