La aldea, ubicada a unos 40 kilómetros al norte de Seúl, sufrió daños a gran escala el pasado jueves después de que dos aviones de combate KF-16 lanzaran ocho bombas MK-82, fuera de un campo de entrenamiento, durante unos ejercicios con fuego real.

Planeamos continuar con los estudios de daños esta semana, por lo que el recuento de daños podría cambiar», divulgó el gobierno municipal. La administración central de Corea del Sur declaró la región afectada como zona especial de desastre, lo que le da derecho a recibir apoyo financiero para las labores de recuperación y fondos de socorro para las víctimas.

Inicialmente, se informó de 58 edificaciones dañadas, pero el número ha aumentado con cada nuevo sondeo, y, después de un tercero, se elevó de 142 a 152.

Según el gobierno municipal de Pocheon, el número de personas heridas en el accidente se situó en 31; 19 civiles y 12 soldados; no hubo víctimas fatales.

mem/nvo