Durante la víspera se conoció que un juez de esta capital ordenó el embargo de cuentas del gobierno nacional con la compañía Empresas Públicas de Medellín (EPM) debido a una deuda del Ministerio de Minas con esa entidad.

De acuerdo con medios locales, la suma embargada ascendería a 83 mil millones de pesos (unos 20 millones de dólares al cambio actual), pero la deuda rondaría los 46 mil millones, o sea poco más de 11 millones de dólares.

Tras la divulgación del suceso, Petro calificó el acto como una acción política que no se puede permitir.

Añadió que la orden no responde al interés de dotar de mejores condiciones a Antioquia (departamento del noroeste), ni por Medellín (su capital), cuyos barrios pobres no tienen agua potable, ni por el interés nacional, según planteó.

“EPM, que es una empresa pública a la cual la nación ha ayudado mucho, acaba de decir que embarga cuentas de la nación. O sea, no solo el uribismo, -en referencia a los seguidores del expresidente Álvaro Uribe (2002-2010),- sabotea la financiación del Gobierno, sino que además los pocos recursos que tiene los embarga”, denunció el mandatario.

Expresó además que no se pueden soslayar los derechos constitucionales del Gobierno y del presidente, “por política y sectarismo político”.

Un reporte del medio local W Radio, señala por su parte que dos artículos del Estatuto del Presupuesto, el 19 y 34, señalan que las cuentas nacionales no son embargables.

Refirió además que, de acuerdo con fuente del Ministerio de Minas, esa entidad honró el 85 por ciento de los pagos a las filiales de EPM y realizaron un acuerdo de pago conforme a sus capacidades.

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