Este miércoles, el ejército ucraniano atacó una fábrica de piensos compuestos en la aldea de Kózirevka, en el distrito de Bolshesoldatski, y según datos preliminares, cuatro empleados de la instalación perdieron la vida, entre ellos tres hombres y una mujer, escribió Jinshtein en su canal de Telegram.
Precisó que un herido en estado grave «fue trasladado de urgencia» a un hospital. La segunda víctima recibe atención médica en el lugar. «Expreso mis más sinceras condolencias a los familiares y amigos de los fallecidos», agregó Jinshtein.
En este sentido, aseguró que el Gobierno regional proporcionará todo el apoyo necesario a los heridos. Además, el gobernador subrayó que un taller de la planta fue destruido y otras propiedades resultaron dañadas en el ataque.
El pasado 6 de agosto, las tropas ucranianas iniciaron una incursión armada en la provincia de Kursk y ocuparon varias áreas, y desde el día 9 de ese mismo mes, la región vive una situación de emergencia a nivel federal.
El presidente ruso, Vladimir Putin prometió «una digna respuesta» a la provocación de Kiev, al que acusó de disparar indiscriminadamente contra instalaciones civiles, y reafirmó que Rusia logrará todos los objetivos de su operación en el país vecino. mem/gfa





