Fue un triunfo del patriotismo apasionado, de la gran unidad nacional, de la voluntad de que “nada es más precioso que la independencia y la libertad”, y, sobre todo, de millones de personas comunes, pero extraordinarias, dispuestas a sacrificar su juventud y sus vidas, para que el país estuviera en paz y unificado, y la nación fuera independiente, enfatizó.

To Lam pronunció sus palabras en una reunión con representantes de veteranos, ex jóvenes voluntarios y milicianos que participaron en la guerra de resistencia contra Estados Unidos para salvar a la nación.

Refiriéndose a la Gran Victoria de la Primavera, remarcó que su cumbre fue la Campaña de Ho Chi Minh que liberó completamente el Sur, reunificó el país, y terminó gloriosamente la guerra de resistencia más larga, más ardua y más grande en la historia del país contra los invasores extranjeros.

Tras ponderar el papel especial desempeñado entonces por los veteranos, ex jóvenes voluntarios y milicianos, subrayó que los soldados del tío Ho superaron innumerables dificultades y peligros, escribiendo páginas doradas de la historia en cada campo de batalla.

Señaló asimismo que todavía hoy “hay personas que siguen contribuyendo silenciosamente al país en tiempos de paz, desde el trabajo social, el desarrollo económico, la nueva construcción rural hasta la educación de las generaciones más jóvenes”.

Más adelante, To Lam manifestó el profundo agradecimiento y más sincero respeto por los grandes, persistentes y silenciosos sacrificios y contribuciones de nuestros veteranos, ex jóvenes voluntarios y milicianos, cuyas nobles cualidades –dijo- aún brillan en la vida actual.

El líder partidista recordó que pueblo vietnamita tiene la tradición de beber agua, recordar su fuente, ser agradecido y mostrar gratitud a las generaciones anteriores.

En cada etapa revolucionaria, por difícil que sea, nuestro Partido y nuestro Estado siempre conceden importancia y aplican lo mejor posible la política social para quienes prestaron servicios a la patria y se sacrificaron por la independencia y la libertad de la Patria, recalcó.

Políticas y directrices como subsidios, apoyo a la vivienda, exámenes y tratamientos médicos gratuitos, capacitación vocacional, préstamos preferenciales, creación de empleos y cuidado de los hijos de personas meritorias, avalan la responsabilidad del Partido y el Estado hacia quienes contribuyeron y sacrificaron su sangre por la Patria, dijo.

To Lam ratificó la meta de, para el año 2030, lograr que la totalidad de las personas meritorias y sus familias tengan un nivel de vida bastante bueno o superior, y reciban atención integral en los aspectos material y espiritual, mientras los subsidios preferenciales también seguirán ajustándose al nivel más alto del sistema de política social.

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