El comisionado, destacó la necesidad de adaptar los protocolos en la materia, para evitar eventos similares y reconoció que ninguna de las agencias involucradas incluyendo la Policía, tenían experiencia previa en un caso de esta naturaleza.

«Esperamos que nadie pueda abordar una aeronave con ningún tipo de arma, es un proceso en desarrollo», afirmó, aunque al referirse al incidente del jueves, elogió el enfoque creativo y razonable de todas las agencias para garantizar la seguridad de los pasajeros.

Al ser consultado sobre el marco legal aplicable, Williams citó el Artículo 30 del Código Penal, que permite el uso de fuerza letal en defensa propia o de terceros bajo circunstancias extremas.

El jefe de la Policía beliceña, aseguró que se abordarán vacíos en la regulación de armas de fuego como parte del proceso en marcha, incluyendo la decisión sobre posibles cargos legales derivados de este tipo de incidentes, cuya responsabilidad recaerá en la Dirección de Persecución Pública.

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