Lo que llama la atención es que en el departamento capital las muertes violentas subieron 69 por ciento, subrayó una fuente especializada, citada por el diario Prensa Libre. El analista del Centro de Investigaciones Económicas Nacionales (CIEN), Walter Menchú, detalló que los hechos se mantienen principalmente en las zonas 7, 18 y 24.

Precisó que observaron un cambio en las dinámicas criminales y en los liderazgos de las estructuras criminales y pandillas.

Menchú aseveró que ese mismo fenómeno se apreció en los municipios de la urbe Villa Canales, Villa Nueva y Chinautla.

Un último estudio de esa entidad reflejó además que siguen a la metrópoli con más fallecidos de manera violenta Escuintla, Chiquimula, Jalapa y Quetzaltenango.

Exhortó a las autoridades a implementar acciones para controlar los niveles de violencia, porque podrían seguir en incremento.

“Una estrategia debería enfocarse en cómo se retoma el control de aquellos lugares donde se ha perdido totalmente”, consideró el experto.

Hasta ahora, más allá de un tema mediático, no se constató un esfuerzo importante en cuanto a las intervenciones en esas zonas, remarcó.

El exviceministro de Gobernación, Mario Mérida, descartó que luego de implementarse las carpas de seguridad entre agentes de la Policía y del Ejército, trascendieran los resultados, ni si esas acciones son verdaderamente efectivas.

“De no atenderse desde una visión más amplia, creo yo que se les va a escapar de las manos para el próximo trimestre”, enfatizó el extitular en declaraciones al medio.

Después de 15 meses de la administración de Bernardo Arévalo, continúa como un reto a superar la inseguridad (asaltos, ataques armados, entre otros) en las calles de Guatemala.

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