El gobernador de la capital, Jorge Macri, dedicó parte de su discurso de inauguración al sumo pontífice, de origen argentino, quien falleció el lunes pasado a los 88 años de edad:

«Vivimos días muy particulares, la partida del papa Francisco nos conmueve profundamente. En este clima de despedida creo que recordarlo en su sencillez, pero también en la grandeza de un líder espiritual, nos permite dimensionar su legado», manifestó.

Destacó que “además de pastor y guía, Francisco fue un hombre de letras. En una entrevista dijo que sin literatura, música, arte nos volvemos frutas secas, instrumentos sin corazón. Su mirada humanista es parte de ese legado que queremos conservar», aseveró el político.

La Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, cuyos organizadores presentan como la más grande del mundo hispano, se desarrollará hasta el 12 de mayo en el recinto ferial La Rural que tiene una superficie de más de 45 mil metros cuadrados

Durante sus casi tres semanas de duración la visitan, por lo general, más de un millón de lectores y más de doce mil profesionales del libro.

En camino a su aniversario 50 como evento cultural, la Feria propone innovaciones y una programación que suma más de mil 500 actividades con el propósito de reflejar la diversidad y la riqueza de la literatura contemporánea, destacan sus organizadores.

En su intervención el gobernador anunció además la realización de una Bienal de Historietas y del primer encuentro de periodistas escritores en Buenos Aires, llamado “Urgente”. Además, este invierno, la Ciudad iluminará su patrimonio cultural y arquitectónico en el “Festival de la Luz” que se llevará adelante durante el fin de semana de las noches más largas.

Riad, capital de Arabia Saudita, es la Ciudad Invitada de Honor en esta edición de la Feria.

La intervención en la apertura del ministro de Cultura, Leonardo Cifelli, no fue nada feliz, y aunque quiso “dejar atrás” las fricciones políticas que el año pasado hicieron que no asistiera a la inauguración, el público lo abucheó, especialmente cuando nombró al presidente Javier Milei y a su hermana Karina Milei, a quien los argentinos identifican como la “jefa” real en la Casa Rosada.

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