La participación como invitado de honor y orador en la ceremonia inaugural del 20 Día de Vesak de las Naciones Unidas, en la sureña Ciudad Ho Chi Minh, cerró el programa de Dissanayak, lo cual reafirmó los antiguos lazos budistas existentes entre ambos países.
En los encuentros con los líderes vietnamitas, ambas partes observaron con satisfacción el desarrollo de la tradicional amistad y la cooperación multifacética entre ambos países, que se extiende a lo largo de 55 años desde el establecimiento de relaciones diplomáticas el 21 de julio de 1970, señaló una Declaración Conjunta emitida aquí la víspera.
El texto subraya que estos nexos se sustentan en “un alto nivel de confianza política, estrechos vínculos interpersonales y cálidos sentimientos entre ambos pueblos”.
Destaca también que la cálida amistad y el valioso apoyo que ambas naciones se han brindado mutuamente en el proceso de desarrollo nacional sentaron una base sólida para un mayor fortalecimiento y profundización de las relaciones bilaterales en los próximos años.
La declaración reafirma además el compromiso de fortalecer la cooperación en materia de defensa y seguridad nacionales, promover la colaboración en materia de educación y capacitación, el intercambio de delegaciones, así como experiencias en las operaciones de mantenimiento de la paz de la ONU.
Ambas partes –añade- también resaltaron la importancia de fortalecer la cooperación en la lucha contra delitos transnacionales como el terrorismo, la inmigración ilegal y los delitos cibernéticos, y debatieron sobre las oportunidades de colaboración en la industria de defensa para fortalecer el desarrollo de capacidades de ambos países.
Acordaron asimismo adoptar medidas pragmáticas para incrementar el comercio bilateral, e impulsar flujos de inversión más sólidos entre ambos países.
La parte vietnamita, puntualiza el texto, valoró positivamente las inversiones de Sri Lanka en 33 proyectos con un capital registrado total de más de 43 millones de dólares al 31 de marzo de 2025.
Por otra parte, los líderes coincidieron en la importancia de aumentar la conectividad aérea para asegurar un rápido crecimiento del turismo, a la vez que reconocieron el importante potencial de cooperación existente en el sector agrícola, y sus respectivas fortalezas en inteligencia artificial (IA), comercio electrónico y transformación digital.}
En ese sentido, compartieron el compromiso de aprovechar las tecnologías emergentes para el desarrollo sostenible, la mejora de la prestación de servicios públicos y el crecimiento económico impulsado por la innovación.
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