En su tradicional conferencia semanal, el mandatario indicó que en esa cita mundial reafirmará su compromiso con la defensa de la naturaleza y la protección de los mares del país centroamericano.

Además confirmó que, junto al ministro de Ambiente, Juan Carlos Navarro, sancionará pronto el Tratado de Marrakech, antes aprobado por el Consejo de Gabinete y la Asamblea Nacional (parlamento).

A finales de abril, el Legislativo sancionó en tercer debate esa iniciativa que adopta el Protocolo de Enmienda del Acuerdo de Marrakech, por el cual se establece la Organización Mundial del Comercio y el Anexo a dicho Protocolo referente al Acuerdo sobre Subvenciones a la Pesca.

La norma promueve la conservación y el uso sostenible de los océanos, mares y recursos marinos, encaminados a elevar la imagen internacional de Panamá y a destacar su participación en organismos internacionales que promueven los Objetivos de Desarrollo Sostenible mediante una agenda positiva de comercio internacional.

“Este acuerdo consolida la posición de Panamá como líder azul, que es como se denomina, con más de 54 por ciento de nuestras aguas territoriales protegidas”, remarcó.

Mulino indicó además que en esa categoría habría que incluir territorios de importancia mundial como el Parque Nacional Isla de Coiba, patrimonio de la Unesco; leyes de protección a corales; defensa de las ballenas y la suscripción en 2024 del Tratado de protección de alta mar.

El jefe de Estado explicó que el acuerdo de Marrakech prohíbe los subsidios perjudiciales que contribuyen al agotamiento de las poblaciones de peces, promoviendo la sostenibilidad de los océanos y la equidad en el comercio pesquero.

Se estima que esos subsidios globales a la pesca oscilan entre 14 mil y 54 mil millones de dólares anuales.

“Estos esfuerzos ambientalistas deben hablar muy bien de nuestro país”, agregó y adelantó que copresidirá en Niza junto a su par galo, Emmanuel Macron, unas mesas de trabajo, lo que fortalece la imagen del istmo en temas ambientales.

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