“Hay gente que dice que yo podría renunciar a la Presidencia para ir a presidir el Congreso, pero para eso hay que esperar al 31 julio, que es la fecha máxima (de dimitir para postularse como diputado); antes de eso sigan preocupados”, señaló el gobernante en una entrevista con la citada fuente.

Chaves le transmitió a la oposición que en 2026 podría volver como presidente del Congreso, ministro o embajador y aseguró que aún le faltan muchas cosas por hacer para el beneficio de todos los costarricenses, añadió la FIU.

Aún falta por construir la Ciudad Gobierno (proyecto constructivo dedicado a su gabinete) para que el Estado deje de “favorecer a familias poderosas”, expresó el gobernante en alusión a inmobiliarias que cobran alquiler por oficinas estatales.

La edificación de esa obra –aseguró- fue frenada por los intereses del “Estado profundo” representados en la contralora general de la República, Marta Acosta.

“Todavía existe una oposición que no es oposición es obstrucción, el objetivo de ellos es hundir el barco para tomar el timón porque se los estábamos quitando”, aseguró el jefe de Estado.

Esos dados están echados –consideró. Yo no puedo hablar de política electoral, ni favorecer a nadie, pero me parece que la gran pregunta es si el Congreso va a tener esa cantidad mínima de diputados para hacer las grandes reformas.

“Lo que me queda –admitió el presidente- es continuar trabajando muy duro, entregar el poder en democracia y esperarme a ver si algún día me querré volver a lanzar a la política, o irme a que sé yo, leer y jugar golf, vamos a ver, hay otras posibilidades”.

La idea de renunciar al cargo, como procede constitucionalmente, seis meses antes de entregarlo al candidato que gane las elecciones del 1 de febrero, fue comentada varias veces por el presidente Chaves durante los últimos meses.

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