De acuerdo con los reportes, el ataque tuvo como objetivo un campo de reclutamiento militar en Mogadiscio.

Tras la explosión, que fue percibida desde diversas partes de la ciudad, al lugar del incidente arribaron servicios de emergencia y trasladaron a los heridos a diversos hospitales.

Las autoridades locales advirtieron que el número de víctimas podría crecer, mientras el Ministerio de Defensa de Somalia aún no ha emitido información.

Hasta el momento ningún grupo se ha atribuido el atentado en medio de un frágil panorama de seguridad en el país, a pesar de los esfuerzos del gobierno de estabilizar la situación en la capital.

En esta nación del Cuerno de África operan varios grupos extremistas, principalmente Al Shabaab, vinculado a la red de Al Qaeda.

Al Shabaab, que busca imponer en Somalia una versión radical de la ley islámica, perpetra ataques contra las tropas gubernamentales, la Misión de la Unión Africana en el país, rebautizada como la Atmis, y las operaciones humanitarias de la ONU; además, ha reivindicado varios atentados terroristas en los países vecinos del este de África.

Somalia dejó de existir como Estado único en 1991, luego de la caída del presidente Mohamed Siad Barre; el único poder reconocido internacionalmente es el Gobierno federal que controla Mogadiscio y algunas otras regiones.

Las demás regiones de Somalia están controladas por formaciones estatales no reconocidas o son territorios autogobernados.

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