La selección de esa provincia norteña marcó en el minuto 92 el gol de la ventaja mediante el pivote Alejandro Gran, luego de un partido con buen fútbol y momentos de superioridad de los alajuelenses, concluido esta madrugada en su estadio Alejandro Morera Soto.

Los llamados manudos comenzaron el juego con ataques frecuentes y aislados remates, mientras los del Saprissa jugaron a la defensiva, revelaron algunas imprecisiones y, en general, parecieron poco ofensivos como equipo.

El conjunto morado también mostró poca agresividad y escasa efectividad en la recuperación de pelotas en reiteradas acciones entre los dos equipos, según apreciaciones de especialistas deportivos.

Los pocos aportes en las jugadas de los dos conjuntos hasta el gol final restaron lucidez a este encuentro de vuelta, sobre todo comparado con el de ida en el capitalino Ricardo Saprissa Aymá, donde los tres goles de cada equipo para el empate final tuvieron un buen respaldo de buenas y variadas acciones.

Hubo espíritu de lucha por el triunfo entre los jugadores de ambas formaciones, a veces con encontronazos sin mayores incidentes, pese al juego fuerte de varios de ellos y algunas discusiones sin consecuencias, y a la tensión generada durante los cuatro minutos de tiempo de reposición.

El punto de la victoria marcó por cierto un apagón que afectó dos torres del estadio y generó confusión entre jugadores, y directivos, lo cual obligó a los atletas a refugiarse, pero una reparación oportuna, aunque algo dilatada, puso todo en orden y abrió el camino para el gol final y el pitazo de cierre.

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