Esta sería la más reciente escalada en los agresivos esfuerzos de la administración de Donald Trump por reunir los vastos recursos y personal de las agencias del gobierno federal para apoyar a ICE en su intento por llevar a cabo lo que el presidente republicano definió como la mayor operación de deportación en la historia de Estados Unidos.
La iniciativa podría involucrar a unos 500 agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP), incluyendo agentes de la Patrulla Fronteriza con uniforme verde encargados de interceptar la entrada de indocumentados y drogas, dijeron fuentes no identificadas a CBS News.
En los primeros tres meses de Trump en el cargo, los cruces ilegales en la frontera sur alcanzaron las estadísticas mensuales más bajas registradas públicamente por CBP.
Datos históricos del gobierno también señalan que es probable que estos sean los menores niveles de entradas irregulares desde finales de la década de 1960.
Las autoridades atribuyen la drástica caída en los cruces fronterizos de indocumentados a las medidas implementadas por Trump luego de asumir su segundo mandato el pasado 20 de enero, lo que trajo consigo una represiva política contra la inmigración irregular, la cual tilda de «invasión».
oda/dfm
