El objetivo de estos encuentros, que tienen lugar en una zona bajo control de los rebeldes de la Alianza del Río Congo-Movimiento 23 de Marzo (AFC/M23), es recabar las preocupaciones y propuestas de diversos sectores en respuesta a los desafíos de seguridad en el este de la RDC, refirieron sus colaboradores.

Se espera que Kabila dialogue con políticos, administradores, agentes de seguridad, las autoridades de Goma, grupos socioculturales, líderes religiosos, organizaciones de mujeres, la Comisión Electoral Federal (CEF), jefes tradicionales y líderes comunitarios.

Al finalizar estas consultas el expresidente tiene previsto ofrecer una rueda de prensa en Goma.

«Avisaremos con antelación a quienes deseen venir desde lejos para que tengan tiempo de prepararse y llegar», explicaron sus colaboradores a Actualité.CD.

La víspera el senador vitalicio se reunió con el expresidente de la Comisión Electoral Nacional Independiente y actual coordinador político de la AFC/M23, Corneille Nangaa, conversaciones en las que estuvieron presentes otros integrantes de la fuerza rebelde y sobre las que no se han divulgado detalles.

Kabila llegó el domingo a Goma en un desafío al Gobierno de Kinshasa y la decisión del Senado de retirar su inmunidad parlamentaria, lo cual permitiría iniciar procesos judiciales en su contra por supuesta complicidad con el AFC/M23, apoyada por Ruanda.

El ex jefe de Estado acusó el viernes a la administración de Félix Tshisekedi de abandonar a los pueblos del este del país y de haberlos castigado con acciones como la desconexión de las instituciones financieras locales de la red bancaria nacional.

Instó a las autoridades a “proteger a la población” y señaló que “el Ejército, la justicia y otras estructuras encargadas del orden y la seguridad deben servir verdaderamente a la población y responder a sus aspiraciones”.

El político, que gobernó la RDC entre 2001 y 2019, responsabilizó al Gobierno por la situación del país, donde en su opinión imperan la corrupción, la malversación de fondos públicos y la voluntad del jefe de Estado suplanta la Constitución y las leyes.

Esto trae como consecuencia desempleo, atrasos salariales, caída del nivel de vida, éxodo rural, delincuencia urbana, hambruna y el aumento de la inseguridad en las provincias de Kivu Norte, Kivu Sur, Ituri y Mai-Ndombe, añadió.

En este escenario de crisis “profunda y multidimensional”, Kabila propuso un pacto ciudadano que ponga “fin a la dictadura”, detenga la guerra, restablezca la autoridad del Estado en toda la nación y restaure la democracia volviendo a los fundamentos de un verdadero Estado de derecho.

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