La magistrada, que dio la instrucción al Departamento de Seguridad Nacional y al Departamento de Estado, decidió una orden judicial firme (una medida cautelar) tras su intervención de emergencia la semana pasada con el propósito de frenar la cancelación de este programa por el Gobierno de Trump.

Burroughs dijo que quería “mantener el statu quo” para permitir que Harvard continúe recibiendo estudiantes extranjeros con visas por el momento y solicitó a los abogados de la institución de enseñanza superior y del Departamento de Justicia que lleguen a un acuerdo para cumplir lo dispuesto.

Por su parte, el abogado principal de Harvard, Ian Gershengorn, advirtió que quiere asegurarse de que no haya maniobras una vez que la orden judicial entre en vigor.

La administración Trump anunció la víspera que le daba a Harvard un mes para tratar de resolver una impugnación legal de la universidad contra los intentos del gobierno de prohibir las matrículas de estudiantes extranjeros.

Los abogados del Departamento de Justicia notificaron a un juez federal este jueves que el Departamento de Seguridad Nacional había enviado al centro de altos estudios una “Notificación de Intención de Retiro” del Programa de Estudiantes y Visitantes de Intercambio.

Esta semana el Departamento de Estado también instruyó a las embajadas y consulados de Estados Unidos en el mundo a detener las nuevas citas para visas de estudiante.

La emisión de esas visas estará en pausa mientras se trabaja en una guía para ampliar la “evaluación y verificación de redes sociales” de todos los solicitantes de ese permiso, subrayó un cable diplomático firmado por el secretario de Estado Marco Rubio, una medida que llega en un momento en que fueron revocados ya numerosos visados de estudiante y en el contexto de la disputa con Harvard.

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