La noticia se encarga de difundirla este sábado la revista digital Política OnLine la cual señala que la molestia de los hermanos Milei recae en particular sobre el embajador argentino ante el organismo continental, Carlos Cherniak, a quien ordenaron evitar que la Relatoría Especial para la Libertad de Expresión, bajo la égida de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), emitiera la condena.
La CIDH analizó la libertad de expresión en toda la región y destacó en varias de sus páginas la mala relación con el periodismo que afectan la libertad de expresión y confirman el giro autoritario del presidente Milei, impulsado por Santiago Caputo, añade Política OnLine.
La Relatoría Especial que dirige el colombiano Pedro Vaca Villarreal registró «un deterioro acelerado del ambiente para el ejercicio de la libertad de expresión en la Argentina, caracterizado por la baja tolerancia del Poder Ejecutivo hacia las críticas y los procesos deliberativos», agrega el medio.
Asimismo, remarca que se reportaron «con alta frecuencia discursos estigmatizantes, principalmente desde altas autoridades del Estado contra periodistas y medios de comunicación, y particularmente contra mujeres».
La Relatoría también registró «cambios significativos en el marco institucional relacionado con el acceso a la información, los medios públicos y la publicidad oficial».
Tras su regreso de Roma adonde viajó por el fallecimiento del papa Francisco, Milei incluso llegó a proferir en un discurso público que “no se está odiando lo suficiente a los periodistas”, insulto a los que se sumó su asesor personal Santiago Caputo, y el hermano de éste y ministro de Economía, Luis Caputo.
A causa de ese lenguaje agresivo, el periodista y comentarista Roberto Navarro, director de El Destape, fue agredido por tres individuos en el lobby de un hotel en Buenos Aires.
El mandatario también acusó en lo penal a cuatro periodistas quienes lo criticaron por su proceder autoritario, y dos de ellos hicieron una analogía con el comportamiento de Adolf Hitler en su ascenso como máximo líder del fascismo.
La Relatoría señaló que la prensa debe ejercer libremente su derecho a informar sobre actividades estatales, correspondiendo a la ciudadanía el derecho a ser informada sobre asuntos de interés público.
El uso del derecho penal o de acciones civiles desproporcionadas para limitar la libertad de expresión sobre asuntos de interés público contraviene el artículo 13 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos y estas prácticas constituyen «un uso abusivo de los mecanismos judiciales».
«Esto le pega fuerte a la imagen del gobierno en el mundo y es evidente que a alguien se le pasó hacer las gestiones necesarias para evitar o postergar este dictamen», opinó el vicecanciller Eduardo Bustamenta.
Al gobierno de Milei no le molesta que lo critiquen por asumir posturas ultra conservadoras contra la Agenda 2030, pero si le molesta mucho que un organismo internacional que tiene fuerte alineamiento con Washington cuestione una obsesión medular del libertario -compartida con otros líderes de inclinación autoritaria- que es el ataque a la prensa, concluye Política OnLine.
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