Boluarte fue autorizada a ausentarse para tal efecto desde el 11 hasta el 17 de junio, con los votos de 58 de los 130 congresistas, la oposición de 35 y la abstención de dos.

Durante el debate, los partidarios de otorgar el permiso argumentaron sobre todo la importancia de las relaciones diplomáticas y económicas con Francia y la atención que merece la invitación a una visita de trabajo que Macron hizo a la mandataria, según informó esta en su pedido de permiso de viaje.

Los opositores insistieron en la necesidad de que la mandataria permanezca en el país para afrontar problemas como el desborde de la criminalidad y los conflictos políticos.

El legislador de la Bancada Socialista Jaime Quito consideró impertinente el viaje, pues dijo que Boluarte debe dar prioridad a los citados problemas y afirmó que la presidenta ha convertido el Palacio de Gobierno en “una agencia de viajes”.

Tras aprobarse el viaje, el primer ministro, Eduardo Arana, agradeció a “los congresistas que confían que el Perú tiene una tarea internacional que realizar” y aseguró que la jefa de Estado, a su regreso, “traerá buenas noticias”.

Según la agenda oficial de la visita, Boluarte asistirá el domingo a un encuentro de bienvenida a los jefes de Estado y de Gobierno llegados a la ciudad de Niza para intervenir en la UNOC3 e invitados por Macron.

Al día siguiente, participará en la inauguración de la conferencia UNOC3 e intervendrá en el debate general y sostendrá reuniones bilaterales con el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves; el primer ministro de Vietnam, Pham Minh Chinh, y el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, Mathias Cormann.

Boluarte se reunirá el martes con el presidente Macron y tiene citas con la secretaria general de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, Rebeca Grynspan, y la directora ejecutiva del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, Inger Andersen.

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