Así lo hizo saber el primer ministro vietnamita, Pham Minh Chinh, al hablar la víspera en nombre del bloque regional, cuya privilegiada ubicación geográfica lo convirtió, desde tiempos inmemoriales, en el corazón de una Asia marítima donde se entrelazaron las rutas comerciales, culturales y de cooperación a lo largo de los siglos.
El Mar del Este, subrayó, es una de las áreas más estratégicas del mundo, con sus rutas marítimas vitales, ecosistemas marinos ricos y un pilar clave para los medios de vida, la identidad cultural y la seguridad de cientos de millones de personas.
Sin embargo, al igual que otras regiones del mundo, las aguas de la Asean enfrentan serios desafíos como el cambio climático, el aumento del nivel del mar, la pérdida de biodiversidad, la contaminación marina, la sobreexplotación de los recursos pesqueros y las crecientes tensiones geopolíticas, advirtió.
El jefe de Gobierno vietnamita señaló que para el bloque regional encarar estos retos emergentes implica atender cuatro prioridades, entre las que se incluye garantizar que los mares y océanos sigan siendo espacios de paz, cooperación para el desarrollo y responsabilidad compartida.
Además, promover un enfoque global integrado y esfuerzos regionales en la gobernanza de los océanos, reconocer los espacios marinos como motores esenciales del desarrollo próspero, e impulsar la gobernanza oceánica global, basada en la cooperación y no en la competencia.
Minh Chin reafirmó asimismo los compromisos de su país de ser proactivos en la implementación de políticas y programas para el desarrollo de las economías marinas sostenibles y la restauración de los ecosistemas marinos, y promover relaciones de cooperación y para compartir conocimientos y transferir tecnologías.
Vietnam, puntualizó, ha registrado 15 compromisos voluntarios en diversas áreas de la gobernanza de los océanos, con el enfoque de “lo que se dice, se hace, y lo que se compromete, debe ser implementado de manera efectiva”.
También ayer el primer ministro vietnamita copresidió la Cumbre Mundial del Delta junto al mandatario iraquí, Abdul Latif Jamal Rashid, y allí subrayó la excepcional importancia que para su país tienen esas regiones, que son zonas densamente pobladas las cuales sirven como centros vitales de la vida política, económica, cultural y social.
Al margen de estos eventos, y según destaca aquí el periódico electrónico gubernamental, Minh Chin sostuvo este lunes en Niza, Francia, encuentros con el vicepresidente chino, Han Zheng, con el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, y con el presidente de la Asamblea General de la ONU, Philemon Yang.
Igualmente se reunió con el presidente francés, Emmanuel Macron, con la directora general de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), Audrey Azoulay, con el titular del Consejo Europeo, Antonio Costa, y con la jefa de la Comisión Europea (CE), Ursula von der Leyen, entre otros.
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