“Argentina hizo historia”, titularon varios medios el éxito de los alumnos del ITBA al ganar el prestigioso certamen científico que organizaron la NASA y la
Sociedad Astronáutica Norteamericana en Virginia, Estados Unidos.
Los estudiantes argentinos diseñaron y lanzaron en el concurso un CanSat, un satélite del tamaño de una lata de refresco, capaz de cumplir una misión aeroespacial completa.
Primero debieron diseñarlo, desarrollarlo, llevarlo a Virginia y lanzarlo a una altura de 700 metros por un cohete, y desde allí debía descender de forma controlada, transmitir datos en tiempo real y registrar imágenes aéreas de todo el vuelo.
El CanSat argentino contó con un sistema de autogiro diseñado especialmente para garantizar un descenso suave, una telemetría que enviaba información en vivo a tierra –como temperatura, presión y velocidad de descenso– y una cámara a bordo que filmó cada segundo del viaje.
Además, los alumnos del ITBA desarrollaron un software propio para procesar y analizar los datos tras el aterrizaje, todo por lo cual le ameritó el gran premio.
mem/mh