Según el portal Cameroun Web, en el ataque se usaron drones que bombardearon una base del Ejército y la cifra de fallecidos puede aumentar.

Sagmé está ubicada al norte del país, fronteriza con el estado nigeriano de Borno, bastión de las actividades de Boko Haram, que actúa junto al denominado Estado Islámico en África Occidental (Iswa), desprendimiento del primero.

Por otra parte, un sacerdote católico nigeriano fue secuestrado por los islamistas junto con otros viajeros, también en el noreste de Borno, según fuentes eclesiásticas.

El obispo John Bogna Bakeni, de Maiduguri, dijo que el Reverendo Alfonso Afina fue secuestrado cerca de la ciudad nororiental de Gwoza, fronterizo con Camerún, en acción atribuida también a Boko Haram.

Observadores políticos recuerdan que gran parte de las tropas camerunesas están desplegadas al otro lado de la frontera con Nigeria como parte de las operaciones contra grupos islamistas, que operan cerca de la zona del lago Chad.

La Región del extremo norte de Camerún es considerada blanco de numerosos ataques, y muy insegura, así como las zonas del noroeste y del suroeste de Camerún donde también actúan rebeldes armados de la minoría anglófona, los cuales se enfrentan a las fuerzas de seguridad y reclaman desde 2017 la independencia de esas zonas, en un país donde la mayoría es de lengua francesa.

Según fuentes gubernamentales, el conflicto armado en las regiones del noroeste y del suroeste desde 2017 dejó ya un saldo de seis mil muertos y 800 mil desplazados en Camerún.

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