Estas nuevas decisiones y el nuevo gasto militar se financiarán con deuda durante varios años, quizás cuatro o cinco, declaró Svantesson, al especificar que el gobierno también se apoyará en la fortaleza de la economía nacional.

Citada por el periódico local Metro, la ministra explicó que para cumplir con las recomendaciones de la alianza, Estocolmo deberá garantizar una financiación más estable para el aumento del gasto en defensa.

El medio señaló que el Ejecutivo sueco pretende destinar unos 300 mil millones de coronas suecas (unos 31 mil millones de dólares) a necesidades militares en los próximos 10 años.

Para 2030, Suecia, que se incorporó a la OTAN en 2024, planea aumentar su gasto en defensa al 3,5 por ciento del PIB, mientras que el año pasado ascendió al 2,14 por ciento.

Anteriormente, el secretario general de la OTAN, Mark Rutte, anunció la aprobación de los planes para la mayor expansión de las capacidades militares de la alianza desde la Guerra Fría.

En una rueda de prensa posterior a la reunión de ministros de defensa del bloque militar en Bruselas, confirmó que había presentado una propuesta para la cumbre de La Haya de los días 24 y 25 de junio: elevar el umbral del gasto militar de los países de la alianza del actual dos puntos porcentuales al cinco por ciento para 2030.

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