Según el medio, el explosivo fabricado por Artur A., de 21 años y residente en un suburbio de Graz, resultó no funcionar.

Fuentes policiales también informaron a la publicación que, poco antes del tiroteo, el autor grabó un vídeo de despedida dirigido a su madre en casa de sus padres, donde vivía, en el que decía que había decidido atacar por voluntad propia.

La madre del tirador recibió el video 24 minutos después de su envío, tras lo cual contactó inmediatamente con la policía, pero para entonces su hijo ya había disparado a personas en la escuela.

Previamente, representantes de la policía del estado federado de Estiria informaron que el presunto autor del tiroteo en Graz era un residente local de 21 años, el cual se suicidó en el edificio de la institución educativa tras cometer el crimen.

Sus motivos aún no se han establecido.

El ministro del Interior austriaco, Gerhard Karner, indicó que el atacante estudió en esta escuela, pero no se graduó.

De acuerdo con el periódico Kronen Zeitung, el agresor dejó una carta de despedida en su domicilio, cuyo contenido aún no se ha hecho público.

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