El jefe de estado ruso, teniendo en cuenta la grave situación provocada por las acciones militares israelíes contra la nación persa, sostuvo conversaciones telefónicas con el presidente iraní, Masoud Pezeshkian, y con el primer ministro de la nación hebrea, Benjamín Netanyahu, precisó la nota de la presidencia del país eslavo.

Putin recordó en su diálogo con Pezeshkian que Rusia «apoyó firmemente los esfuerzos para resolver pacíficamente la situación en torno al programa nuclear iraní», así como «presentó iniciativas concretas para lograr acuerdos aceptables para todas las partes».

El presidente aseguró que Rusia continuará promoviendo la desescalada del conflicto entre Irán e Israel. Además, el mandatario «expresó sus condolencias al liderazgo y al pueblo de la República Islámica de Irán por las numerosas víctimas humanas, incluidos civiles, como resultado de los ataques israelíes».

En la conversación con el primer ministro israelí, el líder ruso «enfatizó la importancia de retomar el proceso de negociaciones y resolver todas las cuestiones relacionadas con el programa nuclear iraní exclusivamente por medios político-diplomáticos».

Según el comunicado del Kremlin, se acordó que Moscú «mantendrá contactos estrechos con los líderes de Irán e Israel para resolver la situación actual, que amenaza con tener consecuencias muy graves para toda la región».

Este viernes, la Fuerza Aérea del país hebreo llevó a cabo varias oleadas de ataques en diversas partes de Irán, incluida Teherán, dirigidos contra instalaciones militares y de enriquecimiento de uranio.

Medios de prensa iraníes comunicaron que más de 90 personas perdieron la vida y otras 360 resultaron heridas en zonas residenciales de varias ciudades como resultado de ataques israelíes.

El líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jameneí, calificó de crimen los ataques israelíes contra su país y afirmó que a Israel le espera un «destino amargo y terrible».

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