En un comunicado, la Cancillería recordó que esos ataques incluyeron a zonas militares, instalaciones nucleares e infraestructura civil.

Los informes sobre víctimas civiles, además de personal militar, son profundamente preocupantes, agregó el Ministerio.

Esas acciones, prosiguió, plantean serias preocupaciones en virtud del derecho internacional, incluidos los principios de soberanía, integridad territorial y protección de los civiles consagrados en la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional humanitario.

Sudáfrica observa con especial preocupación las implicaciones para la seguridad nuclear tecnológica y física derivadas de los ataques en las proximidades de instalaciones nucleares, dijo la Cancillería.

Recordamos, añadió, la firme postura de la Conferencia General del OIEA, reflejada en resoluciones como GC(XXIX)/RES/444 y GC(XXXIV)/RES/533, contra los ataques armados contra instalaciones nucleares con fines pacíficos, considerándolos violaciones de la Carta de las Naciones Unidas y del derecho internacional.

El Ministerio enfatiza como Sudáfrica considera que la legítima defensa anticipada, según el Artículo 51 de la Carta de las Naciones Unidas, requiere pruebas claras de un ataque armado inminente, lo cual no parece corroborado en este caso.

Al mismo tiempo, Pretoria expresa sus sinceras condolencias al Gobierno de la República Islámica de Irán y a las familias de todas las víctimas.

Reiteramos nuestro firme compromiso con la resolución pacífica de las controversias. Sudáfrica insta a todas las partes a la máxima moderación y pide que se intensifiquen urgentemente los esfuerzos diplomáticos para reducir las tensiones y promover la estabilidad en Oriente Medio, se escribe en el texto.

Así, concluye, “apoyamos las conversaciones bilaterales en curso, como las que mantienen Estados Unidos e Irán, y reafirmamos la importancia crucial de establecer una Zona Libre de Armas Nucleares en Oriente Medio”.

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