El gobernador de Kinshasa, Daniel Bumba, señaló que hay numerosas viviendas arrasadas y considerables daños materiales en municipios como Ngaliema, Masina, Lemba y Matete.
La víspera comenzaron los trabajos en varias carreteras estratégicas, entre ellas las avenidas del Turismo; Okito en Binza-Pigeon, y Victoire, donde se derrumbó un puente.
Igualmente prosiguen las labores para restablecer el tráfico y asegurar las zonas afectadas.
“Ante esta tragedia, el Gobierno expresa sus condolencias a las familias de las víctimas y está garantizando el entierro de los fallecidos y el apoyo a los afectados”, dijo Bemba a la prensa local, y reafirmó la continuidad de los trabajos.
También instó a los residentes de las zonas de alto riesgo a actuar con cautela, pues las precipitaciones pueden continuar en los próximos días.
Las lluvias torrenciales que azotaron Kinshasa durante la noche del 13 al 14 de junio provocaron graves inundaciones, viviendas destruidas y carreteras dañadas, lo que llevó al vice primer ministro y titular del Interior, Jacquemain Shabani, a convocar una reunión de crisis el domingo para atender la situación.
Ya en abril pasado otro temporal causó perjuicios en cerca de 31 mil viviendas, mientras 43 personas perdieron la vida.
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