«Llevo 20 años diciendo, quizá más, que Irán no puede tener un arma nuclear. Lo llevo diciendo mucho tiempo, y creo que estaban a unas semanas de tenerla», dijo.
La directora de Inteligencia Nacional, Tulsi Gabbard, testificó en marzo que la comunidad de inteligencia estadounidense «sigue evaluando que Irán no está construyendo un arma nuclear y que el líder supremo (Ali) Jamenei no ha autorizado el programa de armas nucleares que suspendió en 2003».
A principios de esta semana, evaluaciones de inteligencia estadounidenses advirtieron que Irán no buscaba activamente un arma nuclear y, que, además, estaba a unos tres años de poder producirla y lanzarla a un objetivo de su elección, según fuentes familiarizadas, citadas en la prensa local.
El jefe del organismo nuclear de la ONU confirmó que no existen pruebas de que Irán esté desarrollando un programa de armas nucleares.
“Nosotros no hemos tenido ninguna prueba de un esfuerzo sistemático (por parte de Irán) para avanzar hacia (la fabricación) de armas nucleares”, dijo ayer el director general de la Agencia Internacional de Energía Atómica, Rafael Grossi, en una entrevista exclusiva concedida a la CNN.
La agresión de Israel contra Irán entró en su sexto día con intercambios de ataques y el peligro de una mayor escalada tras el incremento de las amenazas de Trump.
Trump parece estar a punto de sumarse al conflicto de Israel con Irán con un posible ataque a instalaciones nucleares clave de la nación musulmana.
El mandatario dijo este miércoles que aún no decidió si involucrará al Ejército de Estados Unidos en los ataques de Israel contra Irán, y advirtió que es «muy tarde» para hablar sobre el tema del programa nuclear.
«Puede que lo haga, puede que no, nadie sabe qué voy a hacer», declaró Trump a los periodistas cuando le preguntaron sobre el eventual rol de Estados Unidos en la embestida contra las instalaciones nucleares y militares de Irán.
El presidente admitió que hay facciones entre sus partidarios que no apoyan la intervención militar estadounidense en Irán. “Puede que haya gente un poco descontenta ahora, pero tengo gente muy contenta. También tengo gente fuera de la base que no puede creer que esto esté sucediendo; están muy contentos”, subrayó.
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