Su semanal carta Desde la Presidencia, en ocasión de celebrarse el 30 aniversario de esa instancia judicial, el mandatario sudafricano recordó como el contexto global actual está marcado por la inestabilidad, los retrocesos democráticos y el debilitamiento del Estado de derecho.

El Consejo de Derechos Humanos de la ONU, recordó, advirtió en marzo pasado sobre el aumento de los conflictos, el auge del populismo y los ataques a la sociedad civil, subrayando la necesidad de fortalecer las instituciones democráticas.

En este escenario, prosiguió Ramaphosa, Sudáfrica se distingue por mantener un orden democrático robusto, anclado en una constitución progresista y en la labor ejemplar de su Tribunal Constitucional.

Creado tras intensas negociaciones multipartidistas que precedieron a la transición democrática de 1994, el Tribunal Constitucional fue concebido como una institución independiente, inspirada en modelos internacionales como el Tribunal Constitucional Federal de Alemania, pero con una identidad y valores profundamente sudafricanos.

Desde su primera sesión en 1995, el Tribunal ha sentado las bases de una jurisprudencia humanista, destacando la dignidad y los derechos fundamentales, resaltó el Presidente.

Entre sus fallos más emblemáticos se encuentran la abolición de la pena de muerte, el acceso universal al tratamiento del VIH/SIDA y la defensa del derecho al voto de los presos, enumeró Ramaphosa.

Sin embargo, añadió, también ha emitido decisiones trascendentales en materia de derechos de los pensionistas, protección de pequeños agricultores, igualdad de género en matrimonios consuetudinarios y seguridad de los viajeros ferroviarios.

La diversidad de la Sala del Tribunal, compuesta por jueces de distintas trayectorias y puntos de vista, ha sido clave en la riqueza y profundidad de su jurisprudencia. Como afirmó el expresidente del Tribunal Supremo, Pius Langa, la diversidad judicial no solo mejora la calidad de las decisiones, sino que fortalece la confianza pública en la institución, agregó Ramaphosa.

Finalmente, recordó como en este aniversario Sudáfrica reafirma su compromiso con la defensa de los derechos humanos y la consolidación de una democracia inclusiva, inspirando a otras naciones en la construcción de sociedades justas y equitativas.

rc/mv