En una conferencia de las Cámaras de Comercio Británicas, Bailey comentó que en los últimos meses, se evidencia un fortalecimiento en el mercado laboral, pero persisten incertidumbres en torno al equilibrio general entre la oferta y la demanda en la economía, así como en la firmeza de la inflación restante en el sistema.

Anteriormente a las declaraciones de Baileys, la responsable de la política del BoE, Megan Greene, alertó que el reciente repunte de la inflación en Reino Unido puede no aliviarse tan rápido como se esperaba, y advirtió sobre avanzar demasiado pronto sobre los recortes de tasas.

La inflación general se situó en el 3,4 por ciento en mayo, muy por encima del objetivo del 2,0 marcado por el banco central, cuyas proyecciones prevén que la tasa ascenderá hasta el 3,7 en septiembre y se mantendrá cerca del 3,5 por ciento hasta final de año.

Bailey reafirmó la postura del banco central sobre las tasas de interés, y dijo que las decisiones de política no están predeterminadas y que se espera que los costos de endeudamiento disminuyan gradualmente con el tiempo.

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