Idris, al intervenir en un foro de consulta nacional bajo el lema «Nuestros recursos sociales para nuestra unidad nacional» con sede en la Academia Africana de Excelencia en Liderazgo, enfatizó la necesidad de que esos valores perduren.

«Etiopía, una nación con una historia distinguida y un legado cultural profundamente arraigado, se ha basado constantemente en su sabiduría tradicional y en sus instituciones comunitarias para mantener la unidad y la estabilidad», subrayó.

Consideró también el papel crucial de los líderes religiosos y los ancianos en la preservación de la paz a través de las valiosas tradiciones sociales y culturales del país.

Reafirmó el legado de coexistencia pacífica del país y su capacidad única para gestionar la diversidad con sabiduría y fortaleza. “Etiopía se erige como un modelo de Estado africano moderno que ha preservado su unidad, independencia y soberanía”, declaró.

Al condenar el conflicto como una vía destructiva y obsoleta, el ministro instó a un mayor compromiso con el diálogo y la comprensión. Mencionó las señales alentadoras de progreso, en particular de los grupos de las regiones de Oromia y Amhara, que comenzaron a colaborar con los esfuerzos de paz del gobierno y a mostrar su disposición a dialogar.

Por su parte, el ministro de Estado para la Paz, Keiredin Tezera, también reafirmó que la paz es una responsabilidad compartida.

Tezera explicó que el objetivo principal de la consulta es empoderar a los líderes tradicionales y religiosos para que amplíen sus contribuciones a la consolidación de la estabilidad y salvaguarda de la armonía nacional.

El foro de dos días reunió a padres religiosos, líderes comunitarios, ancianos y representantes de instituciones de paz de todas las regiones y administraciones municipales.

Participaron el comisionado jefe de la Comisión de Diálogo Nacional de Etiopía, Mesfin Araya, miembros del Comité Permanente de Relaciones Exteriores y Asuntos de Paz de la Cámara de Representantes del Pueblo (Parlamento).

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