En su reporte con los estimados provisionales, la fuente oficial advirtió sobre el incremento en el índice de precios al consumidor, después de que en mayo alcanzara un 0,8 por ciento, inducido entonces -sobre todo- por el costo de los alimentos.

Según el Insee, la responsabilidad fundamental en la inflación se atribuye en junio al auge de los precios de los servicios, en particular el alojamiento, la salud y el transporte, con un 2,4 por ciento.

También el costo de los alimentos aumentó 1,4 por ciento, mientras que los cigarrillos lo hicieron un cuatro.

En cuanto a la energía, continuó en junio su tendencia a la baja, al ceder los precios un 6,9 por ciento, después del ocho registrado en mayo y del 7,8 en abril.

De acuerdo con encuestas, el aumento de los precios constituye una de las principales preocupaciones de los franceses, en un contexto de mucha inquietud por las medidas de austeridad proyectadas para el presupuesto del 2026 y los anuncios de incremento del gasto militar como reacción a la guerra en Ucrania.

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