El jefe del referido Departamento, Munir Al-Qasqas, explicó que las antigüedades recuperadas fueron entregadas oficialmente al Museo Nacional de Alepo.
Se formó un comité técnico de especialistas para distinguir entre piezas originales y otras falsificadas, con el objetivo de documentarlas y archivarlas digitalmente en los registros museísticos, dijo el directivo.
Aclaró que estas piezas incluyen monedas y piezas de cerámica que se remontan a las épocas griega, bizantina e islámica.

Estas antigüedades se someterán a una limpieza exhaustiva antes de ser enviados a los departamentos correspondientes para su análisis estadístico y clasificación científica, dijo Sabina Baslan, la administradora del Museo Clásico-Islámico.
Mientras, Ahmed Othman, el administrador del Museo del Antiguo Oriente, calificó la operación como un ejemplo exitoso de coordinación entre las autoridades competentes y contribuyó a la protección de un patrimonio cultural que refleja la identidad y la historia antigua de Alepo.
A finales de junio pasado, el Consejo Internacional de Museos (ICOM) emitió una alerta oficial sobre la escalada del saqueo y el tráfico ilícito del patrimonio cultural sirio.

El Consejo explicó en un informe, que el país se enfrenta a la mayor ola de depredación de antigüedades de su historia moderna, en un contexto de falta de supervisión y una creciente demanda internacional de artículos de contrabando.
El informe también explicó que existe un aumento significativo en la circulación de objetos falsificados, en particular monedas antiguas, lo que dificulta enormemente documentar el origen y la legitimidad de los artículos.
El documento criticó el silencio de la comunidad internacional ante este creciente fenómeno, a pesar de las reiteradas advertencias a lo largo de los años.
ro/fm





