Ministra denuncia saqueo del sistema de salud pública en Honduras

Tegucigalpa, 8 jul (Prensa Latina) La ministra de Salud de Honduras, Carla Paredes, denunció hoy los estragos permanentes soportados por el sistema sanitario en los casi 13 años que la oposición de derecha dirigió los destinos de este país centroamericano.

En entrevista concedida a una televisora, Paredes afirmó que en apenas tres años y medio de gestión de la presidenta Xiomara Castro resulta imposible corregir la “destrucción sistemática del sistema de salud que se hizo en más de 12 años”.

La secretaria de Estado informó sobre los avances en la reconstrucción de los principales centros de salud del país, como el Hospital Escuela en Tegucigalpa, así como la edificación y próxima inauguración de cinco modernos sanatorios con el respaldo del financiamiento internacional.

“Estamos recuperando lo que fue saqueado, algunos equipos aún pueden tener un uso ambulatorio y haremos todo lo posible por aprovechar lo que el pueblo pagó y fue abandonado a la intemperie”, enfatizó.

Recordó la situación heredada por la actual administración al asumir las riendas de la nación en enero de 2022, con hospitales en estado de abandono, ascensores sin funcionar, plantas de oxígeno dañadas y equipos oxidados.

“Nos empobrecieron, nos dejaron hospitales fantasmas, pero este Gobierno está respondiendo con obras y no con promesas vacías”, aseguró la titular de Salud.

Paredes también se refirió al programa de entrega gratuita de medicamentos a domicilio, iniciativa puesta en marcha el pasado 1 de julio para mejorar el acceso a los fármacos de pacientes con enfermedades crónicas.

El objetivo de esta inédita iniciativa es garantizar la continuidad de los tratamientos sin interrupciones, evitar gastos innecesarios a las familias y descongestionar los centros de salud que no requieren atención médica directa, subrayó.

“La gente humilde tiene derecho a recibir su tratamiento sin tener que endeudarse o viajar largas distancias, esta es una respuesta digna y humana que muchos no querían que funcionara”, acentuó.

Matizó que esa política pública en Honduras representa un cambio estructural, al obligar al sistema a mantener el abastecimiento de medicamentos de uso crónico como insulina, insumos como jeringas y agujas, algo que no se garantizaba en administraciones anteriores, concluyó.

rgh/edu

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