La vicemandataria consideró un gusto estar en el Palacio de los Deportes y aprovechó primero para enviar un mensaje a la población del país por las familias damnificadas por los últimos sismos, con la ilusión de que pronto se pueda normalizar su situación.

Añadió que 100 días separan de un momento que quedará en la historia, la inauguración de esta cita, y consideró que a través de la práctica de ejercicios, los pueblos se entienden, la juventud se fortalece y la nación se proyecta como lo que es, con talento, pasión y coraje.

El presidente del Comité Olímpico Guatemalteco, Gerardo Aguirre, recordó que en 1972 se crearon los Juegos Centroamericanos, y con los primeros al año siguiente en esta capital se inició la tradición del encendido del fuego.

Tenemos el gran desafió de que se traslade a los otros territorios de la región y a las otras 12 localidades que serán sede, acotó.

Willi Kaltschmitt, miembro honorario del Comité Olímpico Internacional, consideró que estos juegos vienen a ser una herramienta vital para reconocer que este es un gran país y que expondrá héroes que animarán a la juventud.

En la ceremonia, los organizadores presentaron A Balami, la mascota, y la canción oficial del evento, Unidos por el Deporte.

En horas de la mañana se encendió el fuego sagrado en el sitio arqueológico Chuwa Nima’ Ab’aj, ubicado en Mixco Viejo, San Martín Jilotepeque, departamento de Chimaltenango.

El maratonista Alberto González y la badmintonista Nikté Sotomayor lo entregaron a Herrera frente al Palacio de los Deportes.

Con juegos pirotécnicos que se sintieron en casi toda la ciudad comenzó el conteo regresivo hacia una justa que recibirá a los mejores exponentes de Belice, El Salvador, Honduras, Costa Rica, Nicaragua, Panamá y de la sede.

Guatemala tiene experiencia al resultar la nación que en más ocasiones sirvió de anfitriona (en la inauguración de 1973, 1986, 2001 y 2006, junto con Honduras, Nicaragua, Costa Rica y Panamá), según documentos históricos.

Los de azul y blanco lideraron la tabla de la anterior edición (Managua, Nicaragua 2017) con 264 medallas (98 de oro, 82 platas y 84 bronce), seguida de Costa Rica (60, 62 y 48) y Nicaragua (41, 55 y 63), condición que se proponen mantener ocho años después.

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