El presidente de la Federación Angoleña de Baloncesto, Moniz Silva, apuntó que es un gran desafío tener todo listo para la competencia, en particular el acondicionamiento de los complejos deportivos que serán sede de los juegos, así como los escenarios de entrenamiento.

Comentó que a inicios del mes de julio una comisión encabezada por el ministro de Juventud y Deportes, Rui Falcão, e integrada por miembros del Comité Ejecutivo Organizador concluyó una visita de dos días para evaluar los trabajos en la provincia de Namibe.

El equipo recorrió instalaciones de juego y entrenamiento, unidades de apoyo hospitalario y complejos hoteleros, y se reunió con autoridades y comunidades locales, atendiendo inquietudes y recopilando datos esenciales para desarrollar el evento con calidad.

En Luanda igualmente se adoptan medidas para mejorar los escenarios de las competencias en las que intervienen 16 selecciones nacionales y que todos reúnan los requisitos establecidos por la Federación Internacional.

En el salón de conferencias del Centro de Prensa Aníbal de Melo, Silva destacó que una de las características de la prueba es que empleará tabloncillos escolares como espacios de entrenamiento, con lo cual también acercará el deporte a los estudiantes.

Aun cuando están pendientes cuestiones como las facilidades para las trasmisiones periodísticas desde los espacios de competencias y todavía el financiamiento no ha sido liberado en su totalidad, Silva aseguró que se trabaja y se toman en cuenta detalles relacionados con el alojamiento y transportación de atletas.

Angola, 11 veces campeona continental, acoge por cuarta vez el torneo que en esta edición reúne a Costa de Marfil, Cabo Verde, República Democrática del Congo y Ruanda en el grupo A.

En el B clasificaron Túnez, Camerún, Madagascar y Nigeria; en el C estarán los locales junto a Libia, Sudán del Sur y Guinea; mientras en el D confluyen Mali, Uganda, Egipto y Senegal.

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