El pelotón de 179 ciclistas, cinco ya abandonaron por lesión la Grande Boucle, partirá de la paradisíaca comuna balnearia de Saint-Malo con destino a la corta pero empinada subida, un trayecto de 197 kilómetros, con los primeros 150 bastante tranquilos y un cierre trepidante con meta en alto de dos kilómetros de ascenso y pendiente media al 6,9.
La víspera en Normandía van der Poel (Alpecin–Deceuninck) recuperó el liderato en la general, ante la complacencia del favorito campeón vigente, el esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates XRG), quien quedó apenas a un segundo del puntero.
El neerlandés guarda gratos recuerdos del Muro de Bretaña, al ser el último en imponerse en su presencia en el Tour de Francia, hace cuatro años, por lo que opciones de seguir con el maillot amarillo tiene.
Sin embargo, los pretendientes a dominar en la doble escalada final del Muro de Bretaña, que tendrá un aperitivo antes en la propia subida, serán varios, con la posibilidad de que lancen una estocada tanto los cazadores de etapas como los pedalistas que comandan la clasificación.
Los nombres abundan, desde el propio van der Poel y su ilustre perseguidor Pogacar hasta el encendido belga Remco Evenepoel (Soudal–Quick-Step), tercero en la general, el hasta ahora discreto danés Jonas Vingegaard (Visma–Lease a Bike), quinto, y el ídolo local del momento Kévin Vauquelin (Arkéa–B&B Hotels), cuarto.
Hasta ahora ha sido una Grande Boucle pobre para los seis ciclistas latinoamericanos enrolados, con el colombiano Santiago Buitrago (Bahrain Victorious) como el mejor ubicado, decimocuarto a tres minutos y 57 segundos del líder.
Por equipos, Visma–Lease a Bike comanda la clasificación, por delante de UAE Team Emirates XRG y Groupama-FDJ.
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