Según el meteorólogo, la temperatura del aire en la región de Moscú el viernes podría alcanzar entre 33 y 36 grados, cerca del récord de máxima temperatura establecido en 1996.

Tishkovets, agregó que la situación sinóptica en Rusia Central estará determinada por la periferia de la dorsal anticiclónica, con ligera nubosidad y sin precipitaciones.

“En Moscú y la región en específico se espera ligera nubosidad y sin precipitaciones. Viento del sureste, de cuatro a nueve metros por segundo, racheado. La temperatura del aire oscilará entre 33 y 36 grados; el récord del 11 de julio es de 35,6 grados, establecido en 1996”, precisó Tishkovets.

Igualmente agregó que la presión atmosférica en la región aumentará ligeramente, alcanzando los 748 milímetros de mercurio. Se esperan tormentas eléctricas breves en algunos lugares durante el fin de semana, que solo reducirán ligeramente la temperatura a entre 29 y 34 grados.

Tishkovets además desmintió los rumores sobre calor récord y aclaró que se espera un verano ligeramente más cálido de lo habitual, con un ligero déficit de precipitaciones.

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