En una declaración, el movimiento político y militar enfatizó que dicha agresión representa una escalada significativa en el contexto del ataque continuo contra Líbano y su pueblo.

Hizbulah indicó que esta hostilidad sionista reafirma una vez más la naturaleza criminal del enemigo, que ignora todas las leyes y convenciones internacionales y no duda en cometer masacres contra civiles pacíficos.

Al mismo tiempo, sostuvo que esto obliga al Estado libanés, con todas sus instituciones, a romper su silencio inútil y a actuar con seriedad, urgencia y decisión para poner a todas las partes internacionales, y en especial a los Estados garantes, ante sus responsabilidades.

En este sentido, la Resistencia reprochó a Estados Unidos por eludir sus compromisos como mediador del acuerdo de alto al fuego, y «ahora lo socava con iniciativas que solo sirven a los intereses y la seguridad del enemigo israelí».

De acuerdo con el partido, Washington intenta engañar al pueblo libanés presentándose como protector de la estabilidad, la seguridad y la unidad del país, mientras en realidad da rienda suelta a Israel para causar destrucción y muerte en todo el territorio nacional.

En este punto, Hizbulah subrayó que la continua ausencia de una postura oficial fuerte y efectiva y la persistente negligencia y falta de adopción de medidas internacionales enérgicas solo conducirán a una mayor agresión y escalada.

A su vez, acotó que este enemigo sionista criminal está intentando, mediante derramamiento de sangre y fuego, presionar la voluntad nacional.

Sin embargo, Hizbulah ratificó que el resistente pueblo libanés, que nunca ha aceptado la humillación, solo se volverá más firme, resuelto y comprometido con sus opciones nacionales.

La Resistencia sigue siendo una vía esencial para enfrentar al enemigo, disuadir su agresión y salvaguardar la dignidad y la soberanía de Líbano, sentenció.

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