La secretaría general del organismo regional denunció en un comunicado que la llamada “ciudad humanitaria” no tiene la más mínima conexión con la civilización ni con la humanidad.

Rechazamos en forma y fondo el proyecto, que refleja un nuevo nivel de decadencia moral y ética por parte de Israel, señaló el texto.

El objetivo, agregó, es continuar el plan de limpieza étnica y reocupar ese territorio palestino.

La Liga Árabe instó a la comunidad internacional a oponerse “con firmeza estos planes inhumanos”.

Asimismo, reclamó un acuerdo de alto el fuego lo antes posible y en ese sentido llamó a Israel a no obstaculizar los esfuerzos para llegar a una tregua en esa zona, bajo fuego desde octubre de 2023.

El Consejo Nacional Palestino condenó esta semana la iniciativa israelí al considerar que en realidad será una gran prisión para cientos de miles de personas. La propuesta representa un giro peligroso hacia la implementación de un proyecto de desplazamiento forzado masivo contra nuestro pueblo, bajo el manto de acciones humanitarias, denunció el presidente de esa institución, Rawhi Fattouh.

El plan constituye una extensión directa de los crímenes de genocidio israelíes, aseguró.

“El centro de detención terrorista del gobierno del apartheid es la cara administrativa del proyecto de genocidio y forma parte de un complejo crimen de guerra que incluye asesinatos en masa, detenciones forzadas y limpieza étnica”, insistió.

Asimismo, acusó a Estados Unidos y a otras potencias occidentales de proporcionar cobertura política y militar al proyecto, que calificó de racista.

Hace unos días, el Monitor Euromediterráneo de Derechos Humanos acusó a Israel de planear la creación de un campo de detención masivo en el sur de la Franja para encerrar a gran parte de la población de ese enclave costero.

El proyecto prevé el traslado de unos 600 mil palestinos después de someterlos a “controles de seguridad”, imponerles estrictas restricciones a sus movimientos y prohibirles su salida a otras áreas, subrayó.

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