«Intime a los abogados regularmente designados por Jair Messias Bolsonaro para que, en el plazo de 24 (veinticuatro) horas, presten aclaraciones sobre el incumplimiento de las medidas cautelares impuestas, bajo pena de prisión inmediata del imputado», indica el auto.
Este lunes, el exmandatario ultraderechista acudió a la Cámara de Diputados, habló con periodistas y mostró la pulsera electrónica en el tobillo.
«No robé del erario público, no malversé fondos públicos, no maté a nadie, no trafiqué con nadie. Este es un símbolo de la mayor humillación en nuestro país. Una persona inocente», refirió.
Calificó de cobardía lo que le hacen. «Enfrentaremos a todos y a todo. Lo que me importa es la ley de Dios», apuntó.
En una sentencia emitida el lunes, De Moraes, quien informa sobre las acciones de Bolsonaro ante el Supremo Tribunal Federal, explicó que las medidas cautelares impuestas el viernes prohíben al exgobernante conceder entrevistas.
La sentencia del juez impide la publicación de contenido en redes sociales, incluyendo transmisiones, audios, videos y extractos de entrevistas publicadas por terceros.
El magistrado emitió la orden como complemento a las acciones preventivas impuestas el viernes.
Aclaró que la restricción al uso de redes sociales no se limita a las publicaciones personales de Bolsonaro, sino que se extiende al contenido compartido por simpatizantes y aliados.
El incumplimiento de esta disposición podría resultar en su arresto inmediato, en conformidad con el artículo 312 del Código de Procedimiento Penal.
La determinación fue remitida a la Fiscalía General para su conocimiento y posibles comentarios.
Con la ampliación de las restricciones se pretende impedir que el excapitán del Ejército utilice interlocutores o plataformas para seguir influyendo políticamente y movilizando simpatizantes en medio de investigaciones.
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