Los manifestantes se convocaron como parte de la movilización que intentan hacer de manera pacífica cada miércoles, aunque en esta ocasión lo hicieron para protestar contra los vetos del presidente Javier Milei a las leyes que aumenta haberes y restituye la moratoria previsional, y restablece la emergencia para personas discapacitadas.
Fue una jornada caótica porque el Ministerio de Seguridad ordenó desde el mediodía un inusitado operativo policial que provocó una congestión innecesaria del tránsito que generó malestar entre los automovilistas.
Hubo calles cortadas por las fuerzas antimotines, desorganización e internas en ellas, corridas, gases, golpes y detenidos en una nueva Marcha de la Dignidad que en esta ocasión se trasladó del Congreso a Plaza de Mayo, en la cual los jubilados y sus acompañantes después de duro enfrentamiento lograron abrirse paso y alcanzar su meta frente a la Casa Rosada.
Los incidentes comenzaron a partir de las 17:00 hora local pasadas las 16.30, cuando los jubilados, pensionados, trabajadores y organizaciones sociales comenzaron a marchar hacia Plaza de Mayo, bajo la consigna “Marcha antirepresiva y contra el veto presidencial”.
Eso obligó a los efectivos de la Ciudad de Buenos Aires a reagruparse, lo que provocó una violenta ida y vuelta con los manifestantes, que terminó con un jubilado detenido.
“El operativo es un desastre, por eso la Policía quedó desorganizada y no sabe qué hacer. Recién un efectivo le pegó una piña a un manifestante”, describió el reportero de C5N Nicolás Munafó.
El conductor del programa Argenzuela del canal C5N, Jorge Rial, comentó que el caos vivido en el centro de la capital es responsabilidad de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, al ordenar un megaoperativo sinsentido, y con ello culpar por el desorden público a los jubilados, “pero no se percata que al que más daña es al gobierno y la imagen de este”, resumió.
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