La noticia sorprendió, aunque de alguna manera podría considerarse previsible, después de los llamamientos recurrentes en los últimos meses del mandatario galo a crear condiciones para la solución de los dos Estados como única salida viable del conflicto palestino-israelí, agravado por la destrucción de la Franja de Gaza.

Desde la izquierda recibieron los comentarios de Macron, colocados en su cuenta en X, con una mezcla de celebración y cautela, y críticas al presidente por demorarse en esta decisión de reconocer a Palestina, lo cual ya han hecho más de 140 países, entre ellos varios europeos.

Para el líder de La Francia Insumisa, Jean-Luc Mélenchon, se trata de una victoria moral, que aprovechó para exigir “el fin inmediato del genocidio” contra los palestinos en Gaza.

Sin embargo, el varias veces candidato presidencial se preguntó porqué el reconocimiento será en septiembre, según Macron desde la tribuna de la Asamblea General de la ONU, y no ahora, y por qué no se decreta un embargo de armas contras Israel por sus crímenes.

También el secretario nacional del Partido Comunista Francés, Fabien Roussel, reclamó hechos y no palabras, al exigir un anuncio sin demoras, porque “la paz no puede esperar más”.

Roussel pidió además sanciones contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.

Para la principal figura de los ecologistas franceses, Marine Tondelier, ojalá el adelanto del presidente sobre el reconocimiento al Estado palestino ayude a mejorar la situación en Gaza, amenazada por la hambruna por el bloqueo total que le impone Israel.

Una opinión diferente manifestó el presidente del partido de extrema derecha Agrupación Nacional, Jordan Bardella, quien calificó de “precipitada” la decisión de Macron, al estimar que beneficia a Hamas.

Su correligionario, el diputado Sébastien Chenu, fue más allá, al hacerse eco del discurso del gobierno israelí de que “es el terrorismo el que gana”.

En el nivel internacional, Netanyahu condenó el anunció del jefe del Elíseo, mientras que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, lo resaltó.

Juntos debemos proteger lo que Netanyahu intenta destruir, la solución de los dos Estados, la única salida, subrayó Sánchez.

Macron insistió en que la paz en el Oriente Próximo es posible y demandó apoyo en Francia y en el nivel internacional para materializarla.

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