En la meta situada en la estación de esquí de La Plagne, un puerto fuera de categoría por sus 19,1 kilómetros de ascenso y pendiente media al 7,2 por ciento, Arensman conquistó su segunda victoria parcial de la Grande Boucle 2025, que dijo este viernes adiós a la alta montaña, con solo dos etapas por cumplir.
Como se esperaba, Pogacar se contentó con vigilar a su gran rival, el danés Jonas Vingegaard (Visma–Lease a Bike), hasta pasar tercero detrás de él en el trayecto de apenas 93,1 kilómetros con partida en Albertville, recortado al detectarse un brote de dermatitis nodular contagiosa en el ganado, lo cual condujo a fijar una zona de contención, que eliminó del programa la subida al Col de Saisies.
Considerando la diferencia en la general, la etapa accidentada de mañana entre Nantua y Pontarlier y el cierre el domingo en los emblemáticos Campos Elíseos parisinos, Pogacar se encamina a retener la corona del año pasado y a conseguir el tetracampeonato en el Tour de Francia.
El esloveno saca cuatro minutos y 24 segundos en la batalla por el maillot amarillo a Vingegaard, quien no pudo en los Alpes reducir la ventaja construida por el balcánico.
Después de una mala etapa ayer en el monumental Col de la Loze, el alemán Florian Lipowitz (Red Bull–Bora–Hansgrohe) resurgió hoy y aumentó de 22 segundos a un minuto y tres segundos su diferencia en la tercera plaza sobre el británico Oscar Onley (Team Picnic PostNL).
Pogacar también aseguró prácticamente el título de la montaña, con 117 puntos, 13 más que Vingegaard.
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