Aunque en líneas generales los comentarios son más bien moderados y con muchas reservas, expertos como el economista Santiago Carbó señalaron que el impacto será negativo ya mismo en los consumidores estadounidenses y se temen recortes de las importaciones en el gigante norteño.
Este martes, la portavoz del Gobierno y ministra de Educación y Deportes, Pilar Alegría, dijo que el Gobierno seguirá apoyando a las empresas españolas ante el impacto de los aranceles de 15 por ciento establecidos en los arreglos de la UE con Washington.
Sin cortapisas, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE), que agrupa a más de dos millones de compañías, expresó su rechazo y malestar por el acuerdo comercial alcanzado entre EEUU y la Comisión Europea, criticado también por partidos de la derecha.
Alegría aprovechó para recordar que desde el mismo momento en que comenzaron las amenazas del presidente estadounidense, Donald Trump, de aplicar aranceles elevados a la UE, el Gobierno puso a disposición de las empresas españolas un plan por 14 mil millones de euros para respaldarlas.
También insistió en que se mantienen canales de reuniones y diálogo con el sector, fundamentalmente con aquellos que puedan verse más afectados, para analizar la situación y paliar el impacto de los aranceles.
El director general de la Federación de Vinos de España, José Luis Benítez, opinó que si bien por un lado se expresan de momento con mesura, la preocupación es significativa, aunque el monto de ventas a EEUU no es especialmente grande.
Lo mismo ocurre con los casos de los aceites de oliva y los embutidos españoles, dominios que temen afectaciones en las compras desde EEUU.
Ayer, Jesús A. Núñez, codirector del Instituto de Estudios sobre Conflictos y Acción Humanitaria (IECAH) y profesor de Relaciones Internacionales, comentó que ve el arreglo con resignación.
En declaraciones al espacio La Hora de la Uno de TVE, Núñez dijo que si elevar los gravámenes del 4,8 por ciento al 15 es una buena noticia, supone entonces una subordinación total de la UE a Washington.
A corto plazo veremos las consecuencias, el alza de los precios para los consumidores estadounidenses de nuestros productos, y la dependencia de los 27 del gas y el petróleo de EEUU, valoró.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, apuntó que respalda las negociaciones adelantadas por la titular de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, pero sin el menor entusiasmo.
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