En conferencia de prensa desde el Palacio Nacional de la Cultura, sede del Ejecutivo, el titular subrayó que recibieron 67 en el 2023 y tienen una meta clara que es llegar a 110 para finales del presente 2025.

Constituye un avance no solo cuantitativo, sino además una expansión estratégica y bien focalizada, guiada por criterios técnicos y carestías reales, expresó el funcionario en el habitual espacio llamado La Ronda.

Actualmente, tenemos presencia de comedores sociales en 20 departamentos de este territorio centroamericano, los cuales benefician diariamente con 35 mil raciones a las personas que más lo necesitan, amplió Pinto.

Negó que solo se un número, sino una transformación, al establecerse en áreas priorizadas por indicadores y la magnitud relativa de pobreza municipal.

Recalcó que el organismo no abre comedores por presión ni intereses políticos, “cada apertura responde a datos, diagnósticos y mapas de vulnerabilidad”.

Representan mucho más que un plato de comida caliente, son una acción concreta del Estado para dignificar, proteger y acompañar a quienes se enfrentan a situaciones difíciles, reflexionó el ministro.

Informó, en otro orden, que responden de manera rápida y efectiva a las emergencias por la secuencia sísmica desde el pasado 28 de julio localizada en el departamento de Jutiapa.

Entre el 30 de ese mes y la víspera, acotó, entregamos más de 15 mil raciones calientes en los municipios de Comapa, Zapotitlán y Jerez a través de los comedores sociales instalados en el lugar.

Esa respuesta fue posible gracias a una red de crecimiento, a un equipo comprometido y a una política pública que reconoce la comida como un derecho y no como un favor, dijo el titular.

Alimentar en momentos de crisis es un acto de dignidad, un gesto que restaura la confianza y en muchos casos salva vidas, remarcó.

Cada ración entregada es más que un servicio, es una señal de que el Estado está presente donde más se le necesita, concluyó Pinto.

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