Los costarricenses contagiados en lo que va de 2025 por el parásito (Cochliomyia hominivorax) enfrentan peligros para su vida, porque, aunque poco comunes, las infecciones en humanos pueden resultar fatales, especialmente en pacientes vulnerables, advirtió el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa), citado por el canal Teletica.com.

Las infecciones en cuadrúpedos afectan sobre todo zonas de desarrollo vacuno del país como San Carlos (86 casos), Pococí (34), San Ramón (27), Osa (18) y Siquirres (17), precisó la institución investigadora.

Estudiosos locales reiteran la importancia de reportar cualquier posible caso de gusano barrenador, ya que su propagación pone en riesgo la salud pública y la economía del sector agropecuario.

La cifra de contagiados este año por el parásito que habita los tejidos vivos triplica la reportada en el mismo periodo de 2024, cuando los análisis de laboratorio registraron 19 casos, añadió la fuente.

Los 56 costarricenses infectados hasta ahora en 2025 incluyen a 17 mayores de 75 años, lo cual demuestra el impacto del gusano barrenador en ese sector etáreo, revelaron los especialistas. “Las estadísticas muestran un predominio entre personas de 20 a 64 años y adultos de 65 y más (26 casos), pero los que superan los 75 constituyen el grupo con más registros individuales”, explicó el Ministerio de Salud.

Los hombres, en un análisis de género, representan el 64 por ciento de los contagios (36 casos), con una tasa de 1,3 por cada 100 mil habitantes, mientras entre las mujeres fueron notificados 20 casos, con una tasa de 0,8 por ciento.

Costa Rica mantiene desde febrero de 2023 una declaratoria de emergencia sanitaria nacional por la presencia del gusano barrenador, cuyo contagio es causado mediante los huevos de la mosca Cochliomyia hominivorax y puede causar infecciones severas en heridas abiertas.

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