Según informó el Ministerio de Agricultura, además de la titular de esa cartera, Martha Carvajalino, dialogarán con los manifestantes la ministra encargada de Ambiente y Desarrollo Sostenible, Irene Vélez; el viceministro del para el Diálogo Social y los Derechos, Gabriel Rondón y el gobernador de Boyacá, Carlos Andrés Amaya.
Apuntó además la fuente que durante el encuentro se discutirá con los representantes del campesinado la protección de los páramos, así como otros temas de interés.
Los cierres en las carreteras, que ya suman tres días en Boyacá, impiden el flujo vehicular regular lo mismo para el transporte de pasajeros que para el de carga.
En entrevista con W Radio, la presidenta de la Asociación Colombiana de Procesadores de la Leche, Ana María Gómez, comentó que hasta la tarde ayer hubo más de 500 mil litros de leche cruda represada en los puntos de paro.
Las protestas también se extendieron al vecino departamento de Cundinamarca y en ellas también participan pequeños mineros dedicados a la industria del carbón.
Tanto campesinos como mineros protestan por las regulaciones ambientales que, a su juicio, les impide sacra mayores réditos de su labor.
Con respecto a la labor extractiva, el presidente Gustavo Petro aseguró durante la víspera que “el mundo no consumirá más carbón en pocos años, Colombia debe adaptarse económicamente a ello, y no hacer como el avestruz”.
Consideró entonces que lo necesario en estos momentos es brindar apoyo al trabajador minero y al empresario de los páramos para conducirlos a una conversión laboral.
“El tránsito de la extracción del carbón a la agricultura sostenible, para lograr mejores ingresos a la familia minera, es imprescindible con un periodo de transición, pues la minería verá caer cada vez más el precio mundial del carbón en los próximos años, como viene cayendo desde el 2014”, refirió el mandatario.
Por su parte, el gobernador de Boyacá, Carlos Amaya, expresó en la necesidad de insistiendo en el diálogo entre el Gobierno nacional y los manifestantes para superar una situación que puede traerle pérdidas diarias al departamento por casi seis mil millones de pesos diarios (cerca de un millón 500 mil dólares al cambio actual).
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